Una historia de éxito

Hace 14 años, María Eugenia Rodríguez contrató una limosina y, junto con sus tres hijas, recogió a su esposo en la oficina. "Ese día le dije a mi jefe: muchas gracias, pero mi mujer me sacó de trabajar", recuerda Joaquín Maxemín.

Este peculiar matrimonio asegura que su vida cambió en 1991, cuando una amiga les mostró el modelo de negocios de Amway. Se interesaron, formaron parte del equipo y, al cabo de tres años, ella obtuvo ingresos suficientes para convertirse en su propia jefa y él dejó su trabajo como administrador de una agencia de autos.

"Somos la primera compañía multinivel en el mundo, con presencia en más de 80 países y brindamos a nuestra fuerza de ventas la oportunidad de crear redes de negocios", señala Jesús Álvarez, director general de Amway México. Pero ¿qué es el multinivel? De acuerdo a la Asociación Mexicana de Ventas Directas (AMVD), la característica principal de dicha modalidad es que las personas, además de obtener beneficios por la cantidad de productos que logren colocar en el mercado, se hacen de ganancias a través de las ventas del grupo o red de reclutados que formaron. Precisamente, así funciona Amway.

Una red de ganancias

Según María Eugenia, existen tres formas de generar ingresos bajo el sistema Amway: auto-consumo, facturación y la capacidad que tengas para hacer negocio con otras personas. Cuando ingresas a las filas de la empresa debes adquirir un maletín que cuesta $450, que equivale a una inscripción. Posteriormente, la idea es que conozcas y utilices los productos, que se dividen en cuidado de la piel, nutrición, tecnología del hogar y cuidado personal. Para ello, Amway ofrece precios de mayoreo. La ventaja es que no tienes que comprar artículos de más o montar una bodega; sólo adquieres lo que consumes y lo que vas a recomendar a otros.

Para María Eugenia y Joaquín la oportunidad de emprender juntos un negocio vino con Amway. Mientras ella se encarga de las ventas y el reclutamiento, él lleva la parte administrativa. "Lo que hay que aclarar es que no ganamos dinero por reclutar gente. Eso sería una pirámide y no tiene nada que ver con Amway. Nosotros recibimos un incentivo por ayudar a los "auspiciados" a subir de nivel", recalca la emprendedora. Si los "empresarios" -como Amway llama a su fuerza de ventas- logran que uno de sus "invitados" consuma el volumen de producto equivalente al descuento del 21%, ellos reciben un 4% adicional. De hecho, parte importante de la ganancia de los agremiados de la marca está en cuánto vende la red de gente que formó.

Un negocio para siempre

¿Algo más? El negocio es heredable. Por eso, "aunque nosotros ya no estemos, nuestra hija continuará recibiendo ganancias porque el negocio no para: tu equipo sigue trabajando y generando ingresos?, comenta la empresaria.

Otra de las oportunidades que brinda Amway es que puedes invitar a gente de todo el mundo. "Tenemos vendedores que viven en México con parientes en Estados Unidos. En este caso, ellos tienen la oportunidad de invitar a esos familiares sin importar que no radiquen aquí. Esto es posible porque somos una empresa transnacional y nuestras operaciones son las mismas en todos los países", precisa el director general de la firma.
Hoy ellos gozan de libertad financiera porque un día se atrevieron a hacer algo diferente, iniciaron su negocio Amway con esperanza y lograron sus sueños.

Hoy, esta pareja de empresarios ocupa la posición Diamante, lo que significa que tienen una red de reclutados conformada por seis equipos que comercializan una cantidad de productos equivalente al 21% que necesitan para obtener el bono adicional y que además, por separado, facturan hasta 500 puntos (con un valor de $15 aproximadamente cada uno). Amway premiará su esfuerzo con viajes a Jamaica y Las Vegas este año, y el siguiente será a Hawai.